Violencia aprendida

Se siente malestar

por ejemplo como el día de los niños los disfrazan enmascarados con espadas de caricaturas de TV, y no pocos han muerto intentando volar como Superman. Y por un dulce ante un micrófono de cualquier emisora cantan lo que han oído, lo que tienen memorizado, por ejemplo:

—“Si no me querés te corto la cara con una cuchilla de esas de afeitar... Y mato a tu mamá”. Imagínese usted, un niño de cinco años cantando ese comportamiento.

Y continúa con lo siguiente:

—“Ódiame por piedad yo te lo pido...”

Y la muchahcita canta a todo pulmón:

—“Rata de dos patas…escoria del destino…” etc.

Y remata con el

“trickle, trickle Hallowe’en” que en el rito de los hechiceros en sus noches de brujas y el mensaje subliminal MK-ultra es superpuesto en el subconsciente para incitar al consumo por no decir algo peor que retumbe contra tí o contra mí...

—«Dáme dulces para mí, y si no me los das te rompo la nariz. Qué tal? Y la gente sonríe y aplaude la viveza de sus hijos, asumiéndola como el que si no me das algo te hago una travesura, “Trick or Treat”.

El rito es una derivación de la expresión inglesa All Hallow’s Eve (Víspera del Día de los Santos que celebran el 31 de Octubre). Sus orígenes se remontan a los Celtas 2.567 años atrás y fue exportada a América por migrantes europeos en 1846

¿Qué se puede esperar de esa enseñanza consentida y avalada por las fuerzas vivas de la nación del sagrado corazón de Jesús? Todo eso tiene que cambiar porque la Energía obedece sólo a la Ley de Resonancia. ¿O no?